Un mundo lleno de piezas de artesanía para mujeres de todas las edades, un mundo mágico, único, exclusivo, como cada una de nosotras, pero también un mundo de curiosidades, tutoriales, promociones, creaciones, dificultades, alegrías, …
Esta es mi primera publicación en este blog, ahora integrado en mi web y creo que es un buen momento para contarte quien es la mujer que escribirá en este espacio.
¿Cuándo te preguntan quién eres, no se te hace difícil describirte con palabras? A mí si, aunque tenga muy claro en mi cabeza quién soy, materializarlo con palabras no es tan fácil. Así es que creo que voy a empezar por mi nombre, que es lo más sencillo.
Me llamo Carmen, tengo ya unos cuantos añitos, porque lo dice mi DNI, pero yo me siento mucho más joven, estoy casada y tengo dos hijas que crecen demasiado deprisa para mi gusto, una con 10 años y otra con 16 años.
Pertenezco a la generación donde todavía se estudiaba EGB y soy Diplomada en Ciencias Empresariales. Empecé a trabajar muy joven compaginando universidad con trabajo y con clases de manualidades, a las que asistía cuando salía de la Universidad y que mantuve hasta después de casarme y tener mi primera hija.
Soy una de esas mujeres que al quedarse embarazada fue despedida. Si, después de la baja maternal solicité la reducción de jornada y recibí mi carta de despedido, eso sí, con todos los papeles e indemnización correspondiente por un despido improcedente.
Y éste fue mi punto de inflexión
Poco a poco, después de los primeros meses como madre primeriza, sin darme cuenta empecé a dedicarme a la creación de bisutería con piedras naturales y plata, creando mi primera página en Facebook allá por 2013. Y como soy un culo inquieto, en 2015 abrí una nueva página, para separar mis creaciones de bisutería de mis piezas para regalo.
Resultó que, algo que empezó de forma casual, era la mejor forma de trabajar y cuidar de mi bebé sin perderme ni uno solo de sus momentos mágicos. Con los años, nació mi segunda hija y los nombres de mis páginas fueron cambiando, ahora puedes encontrarme en Un baúl de princesas, Menkar Dreams y en El trastero molón.
Los nombres cambiaron y el contenido de las mismas también, al mismo tiempo que lo hacemos mis hijas y yo.
Ahora, soy una mujer distinta, he madurado, la vida se encarga de ello, aunque a veces creo, que no lo suficiente, soy una madraza protectora como dice mi hija mayor, pero no tanto como ella cree, me considero una mujer inteligente (sin pretender ser pedante), en continuo aprendizaje, emocionalmente sensible, algo atacada y que no sabe delegar, soy luchadora y muy cabezota, por eso sigo en este mundo cada vez más difícil de la artesanía, porque me permite desarrollar una profesión sin perderme la infancia y adolescencia de mis hijas.
Y hasta aquí te cuento, al final se reduce a que hago algo que me apasiona por y gracias a mis hijas.
Bienvenida.
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